Rincón González, M. D., "Médicos en Jaén durante los siglos XVI y XVII", B.I.E.G. 163 (1997), pp. 122-128.
Natural de Lepe (Huelva). Recibió su primera formación en Sevilla en el entorno del Arzobispo D. Diego de Deza. Realizó los estudios de gramática y medicina en Salamanca. Hay noticias de su presencia en otra ciudades acompañando a personajes ilustres del momento. Hacia 1530 viajó a Méjico al servicio de D. Antonio de Mendoza, virrey de Nueva España. En 1538 fue procesado ante el Santo Oficio como consecuencia del uso de un sigilo o joya. Al regresar a España hizo escala en La Habana y en la isla canaria de la Palma. Fue vecino de Jaén, según reza la portada de su obra impresa en 1553.
La mayor parte de sus referencia biográficas nos la brinda la propia obra. Por ellas conocemos su vinculación con nobles y altas dignidades eclesiásticas, los Duques de Arcos y Leza, el Conde de Arcos, el Marqués del Valle, D. Luis y D. García Ponce de León, y Fray Pedro de Alva, Arzobispo de Granada, entre otros. El mundo en el que ejerció la medicina justifica sobradamente el contenido de su tratado sobre el ejercicio físico.