[...] Téngase mucho cuidado en buscar maestros de buenas costumbres [...] y procúrese alguna persona religiosa que haga plásticas a los dichos maestros.
(Juan de Ávila, Epistolario espiritual, Carta II)
Con esta palabras el Maestro Juan de Ávila manifestaba su preocupación por el tipo de profesorado de la naciente Universidad de Baeza, lugar a donde acudió San Juan de la Cruz para ejercer como director del Colegio Carmelita de San Basilio. Esta circunstancia propició su trato con el claustro de la universidad.
Durante su estancia en la provincia de Jaén San Juan de la Cruz escribió parte del Cántico espiritual y los Dichos de Luz y Amor, cuyo autógrafo original se conserva en Andújar (Jaén).